A río revuelto ganancia de pescadores pensarán en ese conglomerado fantasioso e inexistente que es la derecha, que ni en sus mejores sueños húmedos podían vislumbrar una izquierda que no se encuentra cómoda ni consigo misma. Cabe destacar que tampoco ellos dan muestra de entendimiento y sí de confrontación por la supervivencia o por realizar la mejor faena el 28 M. Recordemos que Vox y PP partieron peras en la vallecana Asamblea de Madrid con la cita electoral en el horizonte. Pero aún así, el río baja con agua para ellos en época de estío (hastío) político.
El milagro de los panes y los peces para la derecha no es que obtengan más votos o convenzan a más personas en la calle, sino que se divida la izquierda y que el pescado no maride con la chapata de hace una semana. Así se encuentran con titubeos, pactos y rupturas difícilmente explicables de quienes decían que había exceso de testosterona en la política nacional para buscar las cosquillas de quienes no se ríen mucho.
Nos quejábamos de tener unos ayuntamientos absolutamente divididos con un sindiós de formaciones en las que dirigir, organizar, hacer y llegar a acuerdos era una utopía maravillosa. Hoy nos encontramos con mayores divisiones y la falta de explicación lógica a unos ciudadanos desafectos de la política. Izquierda Unida retoma el aliento y pacta aquí y allá con quien pilla y con quien está por la labor. Pero a la hora de la labor cada uno tiene una forma de realizarla, ya saben que cada maestrillo tiene su librillo, y cada iglesia una pila bautismal.
Vamos al tema. En Collado Villalba, Izquierda Unida se junta con Cambiemos Villalba y se presentará con una candidatura distinta a la de Podemos. En Galapagar o Majadahonda, Más Madrid e Izquierda Unida irán al unísono. Y sin embargo, en la Comunidad de Madrid, Izquierda Unida y Podemos irán juntos, y además se quejan de que sea la formación de Mónica García – con grandes expectativas de repetir como líderes de la oposición- no hayan querido ser de la partida. Pregunten en su ayuntamiento más cercano quien va con quién y cómo, que precisa una explicación pormenorizada.
Los porqués ya son una segunda pregunta con más devaneos y ninguna certeza. El qué os lo cuento: 4 candidaturas de izquierda en algunos municipios (PSOE, Más Madrid, Izquierda Unida y Podemos), más, en aquellos casos donde toque, los partidos locales que se sientan más cómodos con esa política que con la otra. Pero lo más llamativo es lo que parece una clara falta de entendimiento en defensa de sus marca. Cada uno dará legítimamente la batalla por su cuenta, veremos la ensalada de «resultados», que diría el galapagueño vicepresidente y excandidato a la Comunidad de Madrid, Pablo Iglesias.
Guillermo Redondo es director de informativos de Onda Cero Sierra.
Más noticias
Editorial | Moralzarzal: La soledad evidencia su equivocación, señor alcalde
Editorial | Collado Villalba: Para ellos lo importante es el sueldo, no las políticas
El análisis de Guillermo Redondo | Eramos pocos y parió… la izquierda y Ciudadanos